Notas Médicas
El Mundial de fútbol y el corazón

 

La pasión con la que se mira un partido de la Copa Mundial de Fútbol puede facilitar que las personas con antecedentes de enfermedad cardíaca desarrollen hasta un infarto o arritmias. El estrés emocional que genera una definición por penales o el gol que significa seguir en el torneo o quedarse afuera es potencialmente capaz de aumentar el riesgo de sufrir una descompensación como lo muestran algunos estudios.


Las afecciones cardíacas no sólo afectan a los deportistas que se han esforzado o entrenado en forma excesiva: los espectadores también pueden sufrirlas, especialmente si cuentan con factores de riesgo preexistentes y no controlados. En campeonatos mundiales de fútbol previos se ha detectado un aumento de la incidencia de ataques cardíacos, sobre todo en partidos definitorios y con mucha tensión emocional. Es por eso que el Ministerio de Salud de la Nación llegó a brindar para el mundial previo recomendaciones a tener en cuenta para evitar problemas durante o luego de haber visto los partidos, especialmente si se los mira por televisión.


Esa pasión por el fútbol que es una característica distintiva de los argentinos se exacerba durante los mundiales. Idealmente habría que tomar precauciones para poder seguir alentando a la selección hasta el final de su participación en el campeonato.
Siempre se recomienda a aquellas personas que padezcan de problemas cardíacos y sigan de forma intensa a la selección argentina que tengan controladas su presión arterial, el azúcar en sangre y el colesterol.


Es beneficioso para la salud evitar durante los partidos el consumo de bebidas azucaradas o alcohólicas y las picadas altas en grasas. Se pueden elegir opciones más saludables a los alimentos típicos y también en bueno incluir variedad de frutas y frutos secos.
"Comer mientras miramos la televisión, y especialmente durante los partidos de fútbol, no es una actitud recomendada, ya que cuando prestamos atención a la pantalla perdemos noción de la cantidad de alimentos que ingerimos, pudiendo comer de más. Además, la costumbre de ver el partido compartiendo una picada nos lleva a ingerir una gran cantidad de comidas altas en grasas saturadas y sodio, como snacks y fiambres".


Una opción para disminuir el estrés es recurrir a pausas activas como levantarse, hacer actividad física en distintos momentos y durante el entretiempo del partido.
Tanto el tabaco como el alcohol y la sal elevan la presión arterial; esto, sumado al estrés emocional que puede aumentar durante los partidos, agrava el riesgo de padecer infartos y accidentes cerebrovasculares.


La relación entre el estrés que desata la pasión por un equipo y las afecciones cardíacas tiene tal relevancia que llevó a que la Federación Internacional de Asociaciones de Fútbol (FIFA) dispusiera una serie de medidas de prevención: para la Eurocopa 2004 dispuso que hubiera equipos sanitarios especiales para atender emergencias cardíacas en los estadios, mientras que para el Mundial de 2006 disputado en Alemania se llevaron a cabo estudios al respecto.


Una investigación publicada en la revista médica de Estados Unidos The New England Journal of Medicine demostró que en Alemania 2006 cada vez que jugaba el equipo local se triplicaban las consultas de los hombres y se duplicaban las de las mujeres. El día con mayor cantidad de visitas a hospitales se dio cuando Alemania eliminó a Argentina por penales. Además, estudios científicos realizados durante el Mundial de Francia de 1998 demostraron que las internaciones por motivos cardíacos aumentaron un 25 por ciento en Inglaterra luego de que Argentina derrotara a ese país por penales.

 

La relación entre estrés, factores de riesgo cardiovascular y eventos cardiovasculares es clara. Tengámoslo en cuenta para controlar los factores de riesgo y poder disfrutar del Mundial con buena salud y sin sorpresas con nuestras familias y amigos!

 





EL INSTITUTO TIENE COMO PRINCIPALES EJES DE TRABAJO LA PREVENCIÓN,
EL DIAGNÓSTICO, EL TRATAMIENTO, LA REHABILITACIÓN E INVESTIGACIÓN
DE LAS ENFERMEDADES CARDIOVASCULARES.