Nuestra presión arterial es un valor que está muy lejos de ser un número fijo para cada persona y de hecho es una variable que sufre modificaciones con cada latido del corazón, si calculamos que la frecuencia cardíaca de la gente, dependiendo de su nivel de actividad oscila entre 60 y 100 por minuto habitualmente, tenemos entre 86400 y 144000 registros de presión en 24 horas! La presión es influenciada por múltiples factores como ser actividad física, día-noche, con factores hormonales (por ejemplo, menopausia), factores emocionales, drogas, factores genéticos, hábitos de vida como ser ejercicio, alimentación, tabaquismo y por supuesto, con los cambios estacionales.
El aumento de la temperatura ambiental produce dilatación de los vasos sanguíneos con el consiguiente descenso de la presión arterial, pudiendo ocasionar mareos, cefalea, visión borrosa, debilidad generalizada y taquicardia. Cada persona es diferente y es importante conocer cómo reacciona nuestro cuerpo ante los distintos estímulos ambientales. Es fundamental tomar las precauciones necesarias ante las estaciones extremas (invierno y verano).
Los pacientes con HIPERTENSIÓN ARTERIAL (presión arterial elevada) deben consultar a su médico para ver si es necesario un eventual ajuste de medicación (que en algunos casos puede ser un descenso en la dosis de sus medicamentos antihipertensivos), pero no deben modificar la dosis de sus medicamentos ni suspenderlos sin antes consultar con su médico.
Los pacientes que no son hipertensos también deben tener en cuenta que la presión puede bajar cuando se realiza actividad física y se produce vasodilatación y transpiración profusa por el calor. En estos casos, de constatarse hipotensión arterial (descenso de la presión arterial), deben hidratarse debidamente e ingerir alimentos ricos en sodio (salados), evitar el ejercicio extenuante y especialmente no exponerse al sol sin la debida protección ni al calor.
Durante el invierno, por lo contrario, las arterias se contraen (vasoconstricción) y la presión arterial generalmente se eleva. Los pacientes hipertensos deben tomar recaudos como cubrirse bien del frío, ingerir alimentos sin sal, ricos en potasio y consultar con su médico de cabecera para recibir el tratamiento acorde.
